También vibran mis partículas primarias, incendiarias de mi yo consciente. Y en tu presencia, sana evidencia de mi suerte... Cual bendita agua de fragua candente abrasando mis vertientes, dominando por momentos tormentas en mis adentros.
Verdades que como estruendos de desvelos y asiedades, cubren tan bella locura en envoltura de besos. Y me embarco en ese vuelo tras el velo del misterio, de esta calma que mi alma, sólo busca en el requiebro del anhelo de tus sueños.
No hay comentarios:
Publicar un comentario