jueves, 25 de mayo de 2006

Mis inquietos almamundos

foto: astromía

Se queman mis almamundos. Arden en deseos de crecer y expandirse; como un big bang de sentimientos desmenuzados en interminable espacio-tiempo. Como un todo en la nada viajo en mil pedazos, de adentro a fuera, a toda velocidad.

Voy más allá del universo paralelo conocido, atravesando otros almamundos, cruzando océanos de fuego y partículas sólidas. Otras, de gaseosas y luminiscentes formas, puedo desgarrarlas en este vuelo desenfrenado. Y en mi deseo inocuo de intercambiar energías… las hago mías cual nebulosa hambrienta.

Jamás me retraigo, ni siquiera miro atrás en mi afán de expansión. Trozos de mí quedan pegados a otros almamundos en el intento de continuar mi vuelo y pierdo fuerza; luz, ímpetu. Y así, como fundidos, mis retales se aferran a otros “yo” que también surcan este paisaje despedazados. Y repartidos casi en infinitos micro-estelares cuerpos... colisionamos una y otra vez, como primitivas galaxias recién nacidas; para volver a explotar algún día como brillantes y pletóricas supernovas.

miércoles, 3 de mayo de 2006

nuestra pacífica lucha compartida

Hoy volví a saber de ti. Hoy quisiera volver a verte. Quisiera darte un gran abrazo y charlar durante horas de nada y de todo. Cantarme algo contigo, al unísono, a dos voces, aunque fuera en disonante discordia armónica… y reírnos de la vida. Dar una tregua a nuestras labores de mortales soñadoras para inmortalizar nuestros sueños a golpe de poema cantado y extraños acordes casi inventados; de esos tuyos, de esos míos. Hoy volaría a tu encuentro sin pensármelo y compartiría mis alas contigo, si hiciera falta.

P.D.: tu lucha es la mía, la mía tuya... como bien dices.